domingo, 21 de julio de 2024

Ruta de la Plata: un debate abierto

El debate sobre la necesidad de la vía ferroviaria "Ruta de la Plata", permanecerá abierto hasta que su reapertura no sea una realidad. Hay que coser costuras y vertebrar territorios previamente vaciados. La despoblación hay que combatirla con infraestructuras e inversiones, que deriven en empleo de calidad. Combatir el envejecimiento de Extremadura, Castilla y León o Asturias con un cheque bebe es pretender llenar una piscina con un dedal. La singularidad del oeste español exige hechos tangibles y cuantificables.

El Corredor Mediterraneo está ahí y el del Atlántico va tomando cuerpo, aunque estará incompleto si el Corredor del Oeste -Ruta de la Plata-, sigue siendo un escenario novelado de tiros sobre trenes ficticios de madera.

La dialéctica de una ávida concentración productiva en áreas del norte, este o centro de España es finita, insostenible y está agotada; provocando efectos perniciosos en la racionalidad de los usos de los tiempos de las personas, de la calidad de los servicios públicos o en el coste de la vivienda.

Continuar en la dinámica de un crecimiento basado en el turismo y en la masificación nos conduce a entrar en bucles de ineficacia, que debe ser contestada con otro modelo productivo que facilite nuestra soberanía industrial, agraria y energética.

Tras el cierre del Ruta de la Plata hace 40 años, la Unión Europea en febrero de 2023, incluyó este eje en la Red Transeuropea de Transporte, hecho que obligó a la exministra socialista, Raquel Sánchez a una toma de posición con la licitación de un estudio de viabilidad, finalmente concedido a la empresa Prointec SAU. Su objeto es evaluar la viabilidad técnica, económica y medioambiental de su reapertura. Habrá que estar atentos a las proyecciones del primer informe, comprometido a principios de 2025, para una acertada toma de decisiones.

El estudio definitivo estará en el primer trimestre de 2026 y en un año, presumiblemente, elecciones generales donde las distintas fuerzas políticas deberán fijar posición con respecto a la reapertura de la línea Plasencia-Astorgas, independientemente del origen de su financiación, aunando esfuerzos lejos de la confrontación partidista. Llega a ser lamentable escuchar el apoyo o la observación de la indiferencia a su recuperación, en función de si se está en el gobierno o en la oposición.

Los resultados del estudio deberán ser coherentes con los indicadores de  la próxima Ley de Movilidad Sostenible, en tramitación parlamentaria por la vía de urgencia, para ser aprobada antes de finalizar este año y comprometida con la UE en el Plan de Recuperación y Resiliencia.

Sería incoherente que retos de esta Ley como el acceso al trabajo y a los servicios públicos, la facilidad en los desplazamientos, la descarbonización, la adaptación del transporte hacia una movilidad menos vinculada con la carretera o que la sustantividad de las inversiones públicas se centren en su valor social, no tenga su traslación en la ejecución de un eje ferroviario como el Ruta de la Plata. Estamos hablando de no hurtar el derecho básico de movilidad y de mejora laboral para más de cinco millones de habitantes en torno al Corredor del Oeste, que generaría un ecosistema sostenible y sería una palanca esencial en el reclamado equilibrio interterritorial. Que la Comisión Europea contemple la Red Troncal del Hidrógeno desde Huelva a Gijón, complementaría sinergias en todo el oeste, generando empresas de incuestionable valor añadido.
    
El estudio no puede dejar de poner en valor las potencialidades de un eje vertebrador norte-sur, de puerto a puerto, con conexiones con Sines y Leixoes en Portugal, con Europa, África o América, que de soluciones a la situación de colapso insostenible que vive Madrid; rompiendo la enfermiza dinámica radial que nos condena a pasar obligatoriamente por la capital. Una autopista ferroviaria desde Algeciras hasta Gijón, con más de doce mil contenedores diarios, complementada con un  tren convencional, ampliamente demandado.

Es evidente, que su ejecución debe darse con urgencia a partir de 2027, pudiendo adelantarse el primer tramo de 120 km, Plasencia-Salamanca, con una proyección del coste de 900 millones, según el estudio del Consejo Económico y Social de Extremadura.  Si hay voluntad política, podría estar terminado antes de 2035. Una infraestructura como el AVE Madrid-Sevilla se ejecutó en seis años para 390 km, con un coste de catorce mil millones de euros.

Sobran razones para coser territorios diseñados hace muchos años para su vaciamiento. Razones sociales, productivas, ambientales y económicas. Razones de sentido común para coser costuras y devolver lo que se nos quitó con resultados que siguen provocando desequilibrio, desigualdad y agravios históricos.


NOTA: El 19 de octubre, organizado por Manifiesto X Plasencia, junto con otros colectivos como M.S.U.-Norte de Extremadura, Corredor del Oeste, Movimiento por el Tren Ruta de la Plata, Milana Bonita, y Plataforma Extremeña "Por un tren", tendrá lugar en Plasencia un "Encuentro por la Reapertura del Ruta de la Plata". En septiembre daremos a conocer el programa del mismo. 


 "Encuentro por el Tren Ruta de la Plata"

Lugar: Auditorio  de Santa Ana de Plasencia

Día: 19 de octubre, sabado

Organiza: Manifiesto X Plasencia y Corredor Ruta de la Plata

Colabora: Cámara de Comercio de Cáceres

Enlace de inscripción: https://bit.ly/47iTGuA

o nombre y apellidos con tu correo en manifiestoxplasencia@gmail.com

¡Seguiremos informando!  Inscríbete. ¡Difunde

Acto de afirmación por el Tren Ruta de la Plata, como instrumento de vertebración de territorios y medio estratégico no solo para el oeste, sino para España y Europa.






                                          



                                              


jueves, 11 de julio de 2024

La estación de nunca acabar



A veces una mala decisión, en un momento determinado, condiciona el futuro de un territorio y de una ciudad, y entonces todo comienza a ser manifiestamente empeorable. Les muestro el relato de un error que unos nos ocultaron y que otros no supieron comunicar, llevándonos a un cansancio de fechas y desaciertos.  

Si se acercan por Fuentidueñas, verán los carteles del Gobierno de España y de Adif, anunciando la Declaración de Impacto Ambiental aprobada en el BOE 06/12/2007 y la actuación sobre la conexión de Plasencia con la que debería haber sido la nueva estación de alta velocidad, con una inversión de 27.774292,52 euros. Dos años más tarde, se somete a información pública, a efecto de expropiaciones el Proyecto "Estación de Plasencia-Plataforma". Seguro que la exalcaldesa, Elia Blanco, lo recuerda mejor que nadie.  



En el 2011 se produce la confluencia de los Gobiernos del PP en Plasencia, Extremadura y España; con el tridente Pizarro, Monago y Rajoy. Y aquí comienza la historia de la estación de Plasencia de nunca acabar, con la exministra del PP, Ana Pastor.  

De un proyecto aprobado por los socialistas en Fuentidueña, pasamos a otro en el 2013, asignando tres millones de euros, comunicados por la ministra que habló un día de abrir el Ruta de la Plata. Eran tiempos de recortes. Ahí empezó todo. En noviembre de 2013, el siempre recordado, Antonio Sánchez Ocaña, informa en su diario de cómo el “Nuevo Modelo de desarrollo de los corredores de Alta Velocidad-ADIF-, suprime la estación de Plasencia junto al corredor AVE, para adaptarse a la austeridad presupuestaria”, dándonos el cambiazo por una remodelación de la estación actual.

En resumen, nuestro actual alcalde, renuncia a la Estación -Línea de Alta Velocidad- de Fuentidueñas e inicia un relato de corto recorrido, queriendo hacernos creer que el AVE entrará en Plasencia. El ahorro para el Gobierno es de más de veinte millones y el relato que nos venden es que el PP ha conseguido que el AVE tenga parada en Plasencia. Pero el tiempo pone a cada uno en su sitio.

Años más tarde, en el 2018, los socialistas vuelven a plantear la opción Retortillo o Fuentidueña, a las afueras de Plasencia. Es evidente que un tren de alta velocidad tiene dificultades técnicas y de tiempos para entrar en Plasencia, sirviendo la estación como lanzadera para conectar con Fuentidueña. Los diputados del PSOE, Cesar Ramos y Pilar Lucio, acompañados por el regional Francisco García y el senador M.Á. Nacarino solicitan al Ministerio de Fomento que relancen los estudios porque argumentan que la estación de Plasencia es un fondo de saco donde no puede entrar un AVE.

Y es cuando volvemos a la hemeroteca y Fernando Pizarro dice: “Los socialistas de nuevo hacen un flaco favor a la ciudad; un buen servicio va unido a su cercanía”, y a renglón seguido, avisaba César Ramos: “…sin tener una estación de alta velocidad en el bypass que se ejecuta, muchos trenes no podrán parar”. La idea de los socialistas estaba encaminada a posibilitar una lanzadera desde Plasencia a Fuentidueña porque era lo que aconsejaban los técnicos. Fuentidueñas era el espacio lógico porque anticipa su proximidad con suelo industrial, una ubicación abierta a la autovía Ruta de la Plata, y a Portugal por la futurible Ex-1 hasta Castelo Branco.

Años de silencio, pero las contradicciones generan nuevas soluciones a medias. Tras una licitación fallida a principios de 2024, por incomparecencia de empresas, quedaba desierta, presentándose en estas fechas una nueva licitación por un coste escasamente superior al anterior, anunciándose posibles cambios de ubicación. Hemos vuelto a perder tiempo y los Alvia siguen pasando de largo porque así el trayecto Badajoz-Madrid gana tiempo. 

Manteniendo que soy un profano en estas cuestiones me surgen preguntas que el Gobierno debería, pedagógicamente, explicar. En un primer lugar, si no fuera Fuentidueñas-Retortillo, qué razones hay para hacer ese cambio de ubicación, cuando la zona consensuada de siempre, era el lugar estratégico más cercano al desarrollo de suelo industrial previsto y su continuidad con la posible reapertura del Corredor del Oeste-Ruta de la Plata. Lo digo porque la palabra del Presidente Vara debería servir para algo cuando afirmó en Plasencia, en junio de 2022, que "la estación de Plasencia deberá ir ligada a un espacio industrial". En el 2015, se aprobó un Plan Muncipal con el desarrollo de 150 hectareas. Ahora, solo hace falta que Fernando Pizarro se ponga a la taréa con la Entidad Estatal del Suelo -SEPES-

En cualquier caso, llevamos catorce años de errores en la gestión de una estación que es el cuento de nunca acabar. Cuando nos preguntamos por qué tenemos problemas para subirnos a los dos Alvia con los que cuenta Extremadura, en un juego malabarista de esta fatídica microhistoria, podemos pensar que la estación de Fuentidueñas podría estar resuelta hace muchos años y que gran parte del Norte de Extremadura podría estar beneficiándose de trenes que ahora pasan de largo. En aquel momento, hubo un gobierno del PP que optó por una estación muerta, vendiendo trenes imposibles que te dejaban a las puertas del Ayuntamiento de Plasencia. Algunos lúcidos políticos dicen que Monfragüe queda cerca, por ahora, o que la culpa es del Gobierno.