viernes, 31 de mayo de 2013

No busques empleo



Al parecer Risto se ha apuntado a la moda de escribir un libro, «No busques empleo», con sus 50 excusas para no autoemplearse. En la cadena Ser, le he oído afirmar que «como esperen las personas desempleadas que los políticos o los sindicatos solucionen el problema de una persona desempleada, que esperen sentados». Como una persona en paro piense que un postmoderno oportunista, como Risto, le ofrezca con la lectura de este libro una sola idea práctica, seguro que se convertirá con el tiempo de espera en estatua de sal. Risto, es uno de esos personajes famosos, pero intrascendentes, que atrae la atención de alienados por su carácter esperpéntico en una televisión dirigida a pusilánimes. Su acierto, consiste en haberse dado cuenta que tiene una notable cuota de pantalla para necios.

Y es que Risto, seguro que un hombre hecho a si mismo, sin ayudas de una periferia colectiva,  confunde que una cosa es la defensa del carácter proactivo que debe tener siempre el individuo en la lucha por la vida, y otra muy diferente es plantear, groseramente, la transferencia de toda la responsabilidad al ciudadano convidándole a vivir en el abismo. Precisamente, el abismo que día a día, políticos que se vanaglorian, seguramente como él, de no tener ideología, abren con su profundización en sus políticas cobardes y austericidas. Al parecer, Risto se apunta al individualismo y a la simplificacion de que fuera de la lucha personal no hay asidero alguno y lo colectivo es un invento del pasado. Nos viene a reivindicar, a favor de corriente, el fantasma presente de la “Dama de Hierro”.

Y coincidimos por obvio, que la capacidad de emprender nunca es mala, todo lo contrario, pero pensar que el cambio de modelo productivo viene por ahí es, sencillamente, hacer una llamada colectiva y sostenida a los desesperados para que se despeñen por el desfiladero de la nadería.

Primero la carta de Risto Mejide y después la edición de su libro, seguro que a más de uno conmueve, con su “ha llegado el momento de la empresa de uno”, “no busques trabajo, mejor busca un mercado. No busques trabajo. Mejor busca a un ingenuo. Y a continuación, déjate la piel”; por un momento se me erizó la adrenalina, sentí que alguien me había dado la receta mágica y que era el momento de activar todas mis potencialidades, pero pronto concluí que si buscaba un mercado me encontraría con que aquellos que nos invitan al autoemprendimiento lo están destruyendo, a la vez que nos incitan, embriagados de corrupción en su secta, al  suicidio colectivo. Porque su propagada ausencia de ideología, en esa farsa de esconder las ideas más ultraconservadoras, les lleva a que nada esté regulado porque esa es la mejor forma de activar nuestros aposentados culos. 

Si el canto individualista de Risto fuese posible, y los seis millones se autoemplearan, paradójicamente acabaría con el empleo de la Bañez y otros inútiles de la cohorte, por lo que queda demostrado que un estado fuerte, desde el punto de vista de lo social y público siempre será necesario para regular lo que cantamañanas neoliberales, como él, pretenden vendernos, machacándonos subliminalmente, con que el crecimiento necesita inexorablemente de una selva previa donde voceros de este régimen gritan al unísono “sálvese quién pueda”.

Buena estrategia de un gobierno agotado y agotador, la de realizar una planificación para lograr la invisibilidad de las personas desempleadas; por un lado, la del regalo de cotizaciones para desaparecer de las listas del paro y engrosar la de aquellos que lo capitalizaron, pidieron prestado a la familia un dinero, abrieron un “chiringuito” y a los pocos meses habían colgado el cartel de “liquidación por cierre”. En ese escenario concreto de desahucio total es cuando el ciudadano deja de ser un problema para este gobierno porque ya no tiene prestaciones posibles que recibir y pasa a depender de la caridad. 

Lo peor de todo es que el fracaso termina siendo personal, porque no había realizado un previo estudio del mercado de trabajo, que ahora es inexistente, o porque no tenía ni idea de gestión de empresa, aunque la realidad era que le habían vendido una moto sin ruedas y un tren sin parada en ninguna estación, que son las de los potenciales consumidores. Y no, es que el diseño orquestado es tan artero y sibilino que al final, desahuciado y/o perseguido, a horas intempestivas, por estar registrado en el Servicio de Empleo como demandante, “cazado” para una oferta en esos “programas experimentales de I+D”, donde pones tú el trabajo y el salario de tus cotizaciones, o en la aplicación de la reforma laboral con ese “forzoso trabajo colaborativo”, para sustituirlo por empleo estructural y ahorrar prestaciones sociales, no queda otra que hacer una entrega vital de tu piel, de tu tiempo, de tu dignidad para dejar de sentirte culpable y lanzarte a la tómbola de que el boleto del autoempleo cambie tu suerte.    

Esta claro que Risto sabe autoemplearse, pero mejor que lo siga haciendo con sus borderías en programas televisivos que alienan a su audiencia, pero que tenga la decencia de no simplificar algo tan sensible como es sobre temas de empleo. Yo seré uno de esos que no compre su libro.

miércoles, 29 de mayo de 2013

¿Formación Dual en España?





A falta de ideas propias, al PP le valen las recetas fotocopiadas que vienen de Alemania. De nuevo, la perversión intencionada de un neolenguaje; utilizando significantes iguales que en su esencia significan lo contrario, lo diametralmente opuesto. Utilícese la coctelera mediática, mezclada con la necesidad de dar respuestas al alto nivel de desempleo juvenil y al fracaso escolar, realícese un “copia y pega” del sistema educativo alemán y obtenemos la fórmula magistral por la cual la mediocridad política tiene un “recetario” que vender como una idea innovadora.

Estando de acuerdo en que la alternancia de estudio y trabajo debería ser la apuesta de un sistema educativo articulado al mundo de la empresa, el diseño del mismo no puede apuntalarse sobre la idea de la recuperación del perfil del aprendiz de los años  sesenta.

De los alemanes, nos separa la concepción del modelo productivo basado en el  valor añadido de los procesos industriales, la tipología de nuestras empresas excesivamente atomizadas, la valorización de la formación como inversión y no como gasto y la capacidad de concertación de lo sustantivo de la empresa; empresarios y sindicatos, con el incentivo de las administraciones públicas. 

Solo hay que ver la apuesta que hace este gobierno con la LOMCE por la Formación Profesional Básica -F.P.B.-, buscando resultados cosméticos de reducción de la tasa de fracaso escolar, fomentando una estrategia recurrente, desde un casposo pasado, de segregar a los que un sistema clasista, como pretende, decide quién irá o no, a la Universidad; estando claro que los niveles de participación de uno a cuatro estudiantes a favor de los universitarios es una relación que se debe cambiar a favor de una decidida apuesta por la FP. 

Pero ese objetivo de maridar “estudio y trabajo” en un sistema de formación dual, no se puede hacer fundamentándolo en un “contrato de formación y aprendizaje”; consecuencia de la última reforma laboral, soñado para sustituir empleo con derecho por un empleo precario que presenta una expectativa desmotivadora a aquellos jóvenes que se ven encadenado este tipo de contrato hasta los treinta años, cobrando un 75% del S.M.I. y donde la oferta de certificación profesional de las empresas que deberían acompañar a estos contratos pueden quedarse en el negocio de las gestorías a través de las bonificaciones que tienen las empresas por formación.

Lejos estamos de concertar un diseño de formación en alternancia con potenciación de la red de los Centros Integrados de Formación Profesional, implementación previa en la formación de los coordinadores de Formación en Centros de Trabajo -F.C.T.-, por la tutorización y orientación de los contratos de formación para ser insertados en la empresa, por activar un sistema de formación para el empleo que con este gobierno alcanza los recortes más importantes en las políticas activas de empleo, tanto para trabajadores y trabajadoras ocupados como para personas desempleadas, que nos exige Europa y cuya financiación se desvía, anticonstitucionalmente, a cubrir oscuros agujeros y a implementar políticas neoliberales de dudosos resultados.  

jueves, 16 de mayo de 2013

El Sargento Nisa debe bajarse del caballo





Lo malo de los militares metidos a políticos es que no pueden evitar la inercia de creerse los sheriff del condado. Estos, siempre son divisados por otros políticos, más sibilinos, que considerando burdas las tareas de la hostigación, porque para ellos está reservada la parcela del glamour de los focos y de los discursos enrocados en el conjunto vacío. La "limpieza" la delegan en el fontanero de turno. 

Plasencia, que en los dos últimos años ha visto incrementado su desempleo en un 30%, alcanzando las 6.000 personas desempleadas, ha sido una de las ciudades extremeñas con mayor implosión del paro.  Pinta mal, muy mal y sobre todo si un gobierno como el del Sr. Pizarro, que prometió que "lo primero sería el empleo" se molesta porque se visibilicen las quejas de los que no tienen trabajo, ni tienen prestaciones sociales y que oyendo a los presidentes de gobiernos ya no tienen ni expectativas de encontrar empleo. Es entonces, cuando el sargento de la Guardia Real y Concejal de Interior, Sr. Nisa, ante la sucesión de huelgas generales y manifestaciones ha decidido "cuadrar" al regimiento de desempleados y ciudadanos que, utilizando su derecho a la libertad de expresión, comenzamos a sentirnos "escracheados" por su interpretación de la Ley. 

El Sargento Nisa podrá utilizar retóricamente el cumplimiento de las ordenanzas y solicitar fianzas de 4000 euros a CCOO y UGT por manifestarse el 1º de Mayo o por poner cartelería o hacer difusión por megafonía de sus peticiones de empleo, pero desde el inicio de la transición política con el R.D. 17/1977 ya se reconoció el derecho de los trabajadores y trabajadoras a efectuar publicidad de la convocatorias, por no hablar de las sentencias del Tribunal Constitucional conforme al art. 21 de nuestra Constitución.

Sí, hablo en primera persona afectado por sus multas torticeras, pero también por las impuestas a mis compañeros que desde la huelga del 14-N van mostrándose como tendencia recurrente, siendo las últimas las de miembros del "Campamento Dignidad de Plasencia" por entregar una información relativa a la manifestación que tuvo lugar el pasado 18-Abril, pidiendo empleo social y renta básica.

El Sr. Nisa debería bajarse del caballo y el Sr. Pizarro que lea lo que queda de la Constitución y los derechos, a los que no vamos a renunciar, que tenemos para requerir pacíficamente, como así se hace, nuestro derecho al empleo. Justo aquello que él prometió.

La Crisis será larga y la tensión aumentará sin duda, y el Sargento Nisa ya ha sacado demasiadas tarjetas rojas cuando no se ha jugado ni la primera parte del encuentro. Y todos sabemos lo que pasa con los malos árbitros cuando tiran de tarjeta; que el partido termina con bronca.