lunes, 31 de diciembre de 2012

Que encuentres tu ITACA

Escrito desde la admiración para una amiga en diciembre de 2011, 
y luego repetido hasta la insistencia en el duelo de una despedida, 
en el afecto hacia un amigo que emprende un viaje, 
o en una ausencia, 
pero no encuentro nada mejor para desearte un viaje largo,
 salud, pasión, lucha 
y un lugar donde poder regresar.


En este paréntesis que hacemos a la incertidumbre; adormecida por ruidos estériles que adelantan el carnaval, dibujado sobre una fachada que se descascarilla, te deseo que la pasión sea tu leal aliado para poder alcanzar a saltos el cielo y poder celebrar cienes y cienes de hermanas risas compartidas. Que no te falten nunca los hombros amigos cuando arrecien los inevitables duelos que por sorpresa asomarán por alguna esquina. 

Te deseo múltiples viajes y exploraciones vitales que a veces serán travesías lloradas en soledad por desconocidos mares desiertos. No sientas en ningún momento la ausencia de una Ítaca que te marque el camino de regreso; necesarias travesías que nos curten los forros del alma, arrebatándonos las conchas que un día nos protegieron.

Te deseo encuentros emocionados y fraternos, y que no te roben miles de planeos cuando aún no hayas iniciado el vuelo. Que te sea leve y lejana la tristeza de los egoístas patológicos, que se afanan en llevar permanentemente pegada a la piel, cortando el aire, emociones que vagan perdidas, sin solución, entre mortecinos cipreses doblados por el tiempo. 

Cuídate, compañera, de la quietud paralizante de aquellos que destilan a raudales la mediocridad e indiferencia en el ánimo. Que te sea todo ligero, aunque, hazme caso, evita la escasez del cielo y apuesta por la amplitud de los mares recordando alguna compartida Ítaca; donde algunas veces muchos y la mayoría de las veces muy pocos, tensemos un arco labrado de magia y sueños; templando certeros dardos de fuego, desalojando de las costas de nuestra añorada patria a los lúgubres que eligieron los mares más tranquilos, los besos menos caros y los caminos más cortos. 

Deseos para que nos sigan acompañando los verdaderos dioses de los valores solidarios y que la lealtad nos abrace en un futuro ilimitado de nuevos reencuentros.


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8 comentarios:

  1. TU escrito me ha llegado a lo más profundo de mi alma, lo memorizare´para que siempre me acompañe
    Un abrazo

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  2. Por algún extravío de mi vista, ahora veo tu comentario, cuatro años más tarde. Gracias amiga por tu emoción. Un beso

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  3. Me hiciste llorar, Flaco. Es bellísimo lo que escribiste para la compañera Pilar.
    Sí, así como sólo vos lo podés escribir. Desde tu corazón, con pasión, con amor, con solidaridad.
    Gracias a Pilar que te inspiró y un montonal de gracias a vos por ponerlo en palabras. Alicia desde Buenos Aires

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  4. Tu escrito me a gustado mucho Miguel eres el mejor un abrazo Juan

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  5. Y después de los años sigue tan precioso y emocionante. Un placer leerte.

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  6. Cada invierno por sorpresa me invade tu Ítaca. Apareces y vuelvo a emocionarme.
    Siempre buscare tu abrazo en ese futuro ilimitado de nuevos reencuentros. Que fortuna la mía.

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    1. Gracias, amiga o amigo. Reconfortante leer tu comentario. Que llegue pronto el reencuentro. Un beso y un abrazo

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  7. Qué hermoso y profundo es todo lo que vos escribis. En estos momentos donde estamos todos aislados y con este nuevo enemigo invisible confío en que veremos el nacimiento de un hombre nuevo, como quería el Che. Es imprescidible la solidaridad aunque no podamos salir de nuestras casas(las que la tenemos) No es casual todo lo que está pasando. Mi mirada es la de guerra biológica inyectada en el enemigo Nº 1 de los yankees que es China. Pero el virus se expandió y hoy también los hunde a ellos con ese presidente fascista y xenófono

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