domingo, 16 de marzo de 2025

Nos mojamos el 13 de marzo. ¡Gracias!

 


Un proceso de lucha por la dignificación ferroviaria en el Norte de Extremadura se ha puesto en marcha. Gracias a las 56 organizaciones que asumimos que hay que interpelar al gobierno autonómico y central para que establezcan una hoja de ruta alejada de tacticismos partidarios que den respuestas a las demandas de una parte importante de Extremadura.

El 13 de marzo, en la estación de tren, más de 400 ciudadanos nos  mojamos por la entrada del ALVIA en Plasencia el 1 de abril. Siguiendo la estela de la mejor tradición de la ciudad y las nueve comarcas de la alta Extremadura, hemos vuelto a salir a la calle. 

Gracias al Presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales y a toda la corporación municipal de Plasencia, por su apoyo. Sin la implicación de la Federación de Empresarios Placentina y la Confederación Empresarial de la Provincia de Cáceres (COEPCA), aunar un espíritu de unidad en unas justas reivindicaciones hubiese sido muy difícil. Allí estuvimos extremeños que representamos a las comarcas, al turismo y el comercio, a los jóvenes, a los trabajadores, a vecinos y ciudadanos. 

Gracias a todos los que fuisteis parte de una reivindicación que clama, además, por una estación de alta velocidad que estaba programada desde 2011, más una plataforma logística y la articulación del Corredor del Oeste en el Corredor Atlántico. Reclamamos que se haga público el comprometido informe intermedio del estudio de viabilidad del Ruta de la Plata, Plasencia-León.

Hemos hablado sin pelos en la lengua. En la concentración volvimos a denunciar delante de todos, los graves errores cometidos. El cierre del Tren Ruta de la Plata hace 40 años, la cancelación incomprensible en 2011, del proyecto de la Nueva Estación de AVE de Plasencia-Norte de Extremadura en Retortillo, la eliminación del tren Lusitania de Madrid a Lisboa y el "Sierra de Gredos". 

“De aquellos polvos, estos lodos”, Plasencia y el norte están en declive, ignorados en el proyecto de Extremadura, las inversiones van a las tres capitales y al resto llega “calderilla”. La provincia de Cáceres, según las cifras oficiales del INE, perdió 33.347 habitantes, mientras España creció en 10,8 millones. En la concentración hemos alzado la voz contra la despoblación y la Extremadura invertebrada. Plasencia y el norte existen, no somos castellanos.

Estamos reclamando unas respuestas claras de las administraciones en la realización de unas infraestructuras clave que aseguren la igualdad de oportunidades, el empleo de calidad y la conectividad de cualquier ciudadano a los servicios públicos.

Exigimos para el 1 de abril la entrada de un Alvia de los que en estos momentos circulan por Extremadura. Llevamos más de un año con esta reclamación en los diferentes despachos y de forma pública. Extremadura no se construye estableciendo nuevos desequilibrios a los históricos que ya conocemos. Los tiempos ganados en el trayecto Madrid-Badajoz no pueden ser a costa de obviar a Plasencia y al Norte, cuando su entrada es tan solo un síntoma de las múltiples necesidades que existen en una cuarta parte de nuestro territorio. El norte de Extremadura reclama un espacio en el mapa ferroviario de nuestra región que asegure nuestro derecho social a la movilidad.

Nuestra Presidenta, María Guardiola debe liderar un nuevo Pacto por el Ferrocarril en Extremadura 2025-2035, aglutinando a todas las fuerzas políticas, agentes sociales, económicos y a la sociedad civil, para que el Gobierno de España de respuesta a la deuda histórica que se tiene con Extremadura en materia ferroviaria. Por ello, proponemos iniciar en las instituciones de Extremadura un debate sereno y generoso que tenga por objeto alcanzar un acuerdo de comunidad, como se dio en su momento, para consensuar unas prioridades que sean negociadas con el gobierno central con la fuerza de la unidad alejada de posiciones parciales. Por otra parte, la Junta de Extremadura tiene que comprometerse aportando recursos económicos para el Convenio del nuevo proyecto “Cercanías de Extremadura”.

No vamos a perder ni un minuto más en “lamernos las heridas”, hemos pasado a la acción, a la movilización y en este momento hemos centrado el tiro en dos reivindicaciones claves al alcance de la mano. La Plataforma Logística de Fuentidueñas con 135 hectáreas, ha sido postergada durante lustros por los dos grandes partidos que gobernaron la región. En 2025 debe firmarse un Convenio de Cooperación de la Junta de Extremadura y el Gobierno de España para su despliegue junto a la nueva estación de AVE. Ahí debe conformarse un nuevo nodo estratégico, logístico del Oeste Peninsular. Y el segundo proyecto clave, es el tren totalmente eléctrico AVANT en 2027, con frecuencias suficientes, desde Madrid a Extremadura. Velocidad Alta de media distancia que nos conecta con el resto de España. Con unos tiempos aproximados desde Madrid, en función del número de paradas, a Navalmoral en 1 hora (h) a Plasencia en 1 h. y 20 minutos (m), a Cáceres en 1h 40 m, a Mérida en 2 h y a Badajoz en 2 h y 26 m. Hemos reclamado la licitación inmediata las obras de electrificación de la línea convencional de 172 kilómetros entre Humanes y Talayuela.

Instalarnos en la confrontación estéril entre las principales fuerzas políticas nos conduce a la melancolía. Los errores del pasado deben ser suplidos por objetivos, calendario y presupuestos que igualen a la totalidad de Extremadura, no solo a una parte, con las infraestructuras ferroviarias medias en el resto de España. La división política en contenidos esenciales y servicios públicos no nos la podemos permitir. Se trata de articular una hoja de ruta que posibilite la interlocución de todas las fuerzas políticas y sociales de nuestra comunidad con el gobierno central. Las inversiones ferroviarias más importantes en nuestra región se han producido solo desde la unidad. ¡Hay que mojarse! ¡La lucha imparable por el el tren continúa!.

Reiteramos las Gracias a todos los que participaron e invitamos a todos a sumarse a estas reclamaciones justas por un Tren Digno en Extremadura. Y a nuestros representantes, de todos los colores políticos, les exigimos: compromisos y respuestas efectivas, no parciales, que nos escuchen, que el Secretario de Estado de Transporte se reúna con las plataformas ciudadanas y empresarios, que tengan gestos y “más piel”. No vamos a parar, en la lucha contra la despoblación y el declive, en perder todos los años un millón de turistas por no tener una conectividad del siglo XXI, por el empleo digno y que nuestros empresarios tengan las mismas oportunidades que los de otras comunidades autónomas.

Plasencia, 16 de marzo de 2025


    Fco. Martín Simón        Miguel Coque Durán 


ALVIA EN PLASENCIA: Casi 400 personas claman por un tren digno




martes, 18 de febrero de 2025

El Alvia y Plasencia

 



Muy certero el artículo de Alonso de la Torre en la contraportada del diario HOY, -18-02-25, de “Los Alvia y Plasencia”. Vaya mi agradecimiento y creo que el de gran parte del Norte de Extremadura por su planteamiento crítico, ponderado y valiente. Uno se extraña de que alguien escriba, desde la capital, sobre un problema histórico de Plasencia; afortunadamente hay inteligencia en el planeta. 

Imagino que cuando Alonso habla en plural sobre los Alvia hace referencia a los dos que ya están en funcionamiento -ninguno entra en Plasencia- y al tercero prometido que no acaba de llegar por aquello de que a Extremadura llegan solo los trenes procedentes de Galicia, que se encuentra a la espera de trenes nuevos y hasta entonces la carrocería de segunda no nos llegará. 

Alonso de la Torre, perspicazmente, hace una correlación entre políticos y personalidades que en su momento influyeron en trazados que han terminado dejando a Plasencia y Comarcas en tierra de nadie. Nunca hemos contado con políticos que hayan mirado, ni tan siquiera por objetividad en los temas de infraestructuras por esta parte del Norte de Extremadura. La mayoría sufren de tortícolis. 

Yo no voy a hablar de los Alvia en plural, ni tampoco voy a recordar la promesa incumplida que dejó Guillermo Fdez. Vara, antes de abandonar su presidencia, sobre la entrada de dos Alvia en la “Capital del Jerte”; afirmación irónica por mi parte por cuanto las capitales tienen un estatus que en el caso de Plasencia es tan solo de carácter lírico.

La división provincial de 1833 del absolutista Javier de Burgos, no tuvo a bien dividir Extremadura en cuatro provincias con 42.600 kilómetros cuadrados, aunque sí lo determinara para Galicia con 29.575. Desconozco los criterios para que una de las regiones más extensas de Europa quedase relegada a una división administrativa biprovincial. Claro, esto es historia y por eso, puede que la exigencia histórica de esta ciudad de tener una centralidad administrativa haya sido contestada con displicencia y con argumentos alejados de la racionalidad o sencillamente ignorados, hasta por los propios representantes políticos que han ocupado cargos representativos, salvando honrosas excepciones.

La concentración convocada por la sociedad civil para el día 13 de marzo reclama lo que finalmente decidió el Gobierno de España por razones no explicadas ni argumentadas: por cuestiones de eficacia, a Plasencia llegaría tan solo un Alvia en el mes de noviembre del año pasado. Más tarde, ha sido la terminación del byes pas de Mérida la razón de la demora. Celebrado el 2025, el cambio en la presidencia de Renfe ha sido la que ha dilatado la llegada del Alvia, y puede que ahora la causa sea que la abuela no fuma. Llegado este momento la ciudadanía de Plasencia y del norte de Extremadura tiene que dar muestra de madurez o de interés por lo que le toca defender; porque los quejíos tienen su encanto emocional, pero es mucho más digno cantar por derecho, comprometiéndose. Otra opción es abandonarnos a nosotros mismos. Nuestro silencio sería complice y justificación para que nada cambie.

En este lance, el alcalde de Plasencia sigue en su deriva; este problema no existiría si en el 2012 la estación de alta velocidad hubiese seguido su curso en Retortillo y ya estaría hecha. De la presidenta de Extremadura, María Guardiola, no sabemos nada; nada que decir sobre la estación de la alta velocidad de Plasencia; nada sobre el tipo de estación que debemos tener como zona de importancia logística; nada sobre qué papel debe jugar el Norte de Extremadura y nuestra comunidad con la articulación del Ruta de la Plata en el Corredor Atlántico. Nada sobre el mapa de movilidad de Extremadura y la movilidad de todos los extremeños; también la del Norte de Extremadura

El problema no es cúando llega el tercer Alvia a Extremadura. A nuestra comunidad llegan dos Alvia; uno de ellos debe entrar antes del 1 de abril en Plasencia. Los tiempos a ganar entre Madrid-Lisboa no pueden hacerse a costa de Plasencia y el Norte de Extremadura.


  Los tiempos a ganar entre Madrid-Lisboa no pueden hacerse a costa de Plasencia y el Norte de Extremadura


martes, 21 de enero de 2025

Congreso Socialista en Plasencia




Acaba de cerrar el 15º Congreso del Socialismo Extremeño.  El hecho de ubicar en Plasencia, por primera vez, la celebración de un evento tan importante es toda una declaración de intenciones del Secretario General, Miguel A. Gallardo. Sabe que si quiere gobernar Extremadura deben cambiar cosas como el aislamiento político, económico y cultural de una ciudad que no solo se representa a sí misma sino que debería representar los intereses de todo un norte de la región.   

En una región tan extensa con dos provincias, sin descentralización, se generan situaciones donde Plasencia termina siendo una anomalía por resolver. Y la situación límite de Plasencia ya no da más de sí. A la denominada capital del norte hay que darle un estatus de capitalidad para no perderla; ni es capital de la comunidad, ni es capital de provincia, ni pertenece a una mancomunidad... Somos una ciudad escrita en nuestra carta autonómica, en el artículo 48, que contempla una institución estatutaria como la figura del Personero en Común que es reclamada desde hace 30 años; por no hablar del edificio “Múltiple”, símbolo de lo que debiera ser mayor acercamiento a los administrados, que con el tiempo amortiza cada vez más empleados públicos.  

La necesidad de incorporar a Plasencia al proyecto socialista es vital. Plasencia es la ciudad extremeña con la abstención más alta; diez puntos por encima de la media extremeña. Esa cifra es la clave para el cambio. Alguna culpa en esa indiferencia han tenido los distintos gobiernos extremeños y la propia Diputación de Cáceres, con ausencias ficticias pero también reales. 

En la última década hagamos un ejercicio de memoria de políticos placentinos en nuestras instituciones como parlamentarios, diputados o directores generales y entenderemos muchos de los resultados fatídicos sobre nuestra ciudad. Y claro que no es una cuestión de cantidad pero sí, al menos, de calidad.

Plasencia, partida por el Tajo, siempre ha caído muy lejana. Para amplificar la distancia, en las últimas cuatro legislaturas, hemos tenido un alcalde que venía bien a cualquiera de las opciones políticas; para unos era una máquina de ganar elecciones y para el otro un argumento de justificación para la inacción. Su escasa capacidad para la negociación, sus equivocaciones históricas y su talante de confrontación institucional, hasta con los propios, nos han llevado hasta aquí.

El Congreso Socialista en Plasencia nos deja un propósito de enmienda del nuevo Secretario General del PSOE de Extremadura, que entre otras cosas ha sabido ganar la plaza socialista en la ciudad, porque esto no va de Badajoz y Cáceres, va de cohesión territorial donde hay que incorporar al Norte de Extremadura, en el que Plasencia pueda ser algo más que la capital lírica del Jerte. Esto va de “la tierra que nos une”, el lema del congreso.

Fernando Pizarro afirmaba en una de sus declaraciones sobre las expectativas importantes que había con el Presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, con el que tenía buen “feeling”. La verdad, no entiendo que hayan tenido que ser organizaciones civiles como Manifiesto X Plasencia y MSU quienes hayan tenido que abrir la maleza y desescombrar para volver a una situación histórica como cuando D. Manuel Veiga, Presidente de la Diputación de nuestra provincia, despachaba en Plasencia y le daba a ella y al Norte, más que esplendor.

Aviso a navegantes: las costuras están abiertas y hay que retratarse. Muy acertado el congreso socialista en Plasencia donde en su ponencia marco se han recogido propuestas de futuro para el Norte de Extremadura relacionadas con infraestructuras. Esperamos el desembarco de la Diputación y sobre todo de la Junta de Extremadura; porque las citas médicas no pueden ser de doce días, ni  solo vivimos de palomitas en los presupuestos de Extremadura.  

  

  Otros artículos:    

  la encina solit(d)aria: Plasencia y el Titánic

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 la encina solit(d)aria: 40 años sin tren "Ruta de la Plata"

 

 

martes, 14 de enero de 2025

Plasencia y el Titánic



Se apagan las luces de una ilusión de cabalgata de Reyes e Inocencios. El rey de siempre, entre los adornos que le procura la comparsa de fieles, repite su sueño montado en una carroza que bien podría ser la metáfora de un barco a la deriva. Cientos de luces arropan la parte noble de la plaza que no pueden esconder el saludo jocoso de los plebeyos del fondo sur desde una balconada sin luz, con una pancarta de indignación, que expresa el estado de ánimo sobre las cosas.  

Vuela sobre la ciudad una molicie que curte nuestros rostros de negligencia con sabor a pereza que disfraza la incuria de una sucesión de fotogramas en una secuencia congelada, que se confunde con la falsa espera de lo que debe pasar y nunca pasa. Tal vez se fueron los mejores o se tuvieron que marchar porque nos sobraban y nos siguen sobrando factores de expulsión acumulados en nuestra historia. Es como un polvo en el viento que nos recuerda, momentáneamente, que hay anuncios de tormentas desérticas pero que solo sirven para ponerse a cubierto mientras podamos, para terminar perdiendo la mirada fértil del horizonte .

Me sirve una cita de Leonardo Padura en sus eternas reflexiones sobre su Patria en decadencia para recordar los nombres de ciudadanos que lo intentaron, con derrotas personales y colectivas, y ahora reclaman el silencio  por el dolor de aquellas batallas perdidas: “Nos dedicamos a reconstruir las cosas que pasaron, y las cosas que tuvieron que pasar para que esas cosas pasaran, y las cosas que dejaron de pasar porque pasaron esas cosas”.  El paso del tiempo sigue señalando con más vehemencia a los sujetos activos de lo que pasó y no es nada bueno que pasara. Y acude la frustración porque dejamos pasar lo que ha pasado. Pudimos haber hecho algo más para no sentir ahora la aspereza del desengaño.

Casi todo se convierte en un teatrillo de pueblo taciturno. Una tramoya bien adecentada propicia para los giros de escena, el foso de músicos que acompaña virtuosamente al protagonista de la escena haciendo desfilar con una flauta al considerado y domesticado público. Cañones de luces le acompañan en sus zigzagueos malabarista para mantener la ilusión de los Inocencios, abriendo y cerrando el telón. Todo está pergeñado aunque a veces el apuntador equivoque al artista ocultándole que va desnudo y entonces este desaparece momentáneamente entre bastidores y bambalinas en sus escasos momentos de lucidez. Y hay hasta espacios ocultos al público al servicio de las posverdades, para no arruinar la función.  

Y entonces equivocamos la vida con el bullicio, el ocio euforizante con el ruido tabernario, las murallas seculares de la ciudad con museos inexistentes, anuncios deslumbrantes que nunca se cumplen, suelos quebrados que anuncian besos sobre el suelo, calles oscuras que alimentan el miedo, una carroza con un barco llamado Titánic y entonces es cuando los días se convierten en tardes desmayadas y repetidas. 

Y cuando despertamos de la fiesta o de la siesta, “nos dedicamos a reconstruir las cosas que pasaron, y las cosas que tuvieron que pasar para que esas cosas pasaran, y las cosas que dejaron de pasar porque pasaron esas cosas”.

Despejen el escenario, camerinos y platea. ¡Sálvese quien pueda! Reconstruyo recuerdos de nombres ausentes y presentes, y causas enterradas en un cementerio de proyectos e ideas que algunos pretendes hacernos olvidar.

 

     

 

 

 

 

miércoles, 25 de diciembre de 2024

40 años sin tren "Ruta de la Plata"




Hace 40 años del cierre del "Ruta de la Plata". El 30 de septiembre de 1984, en Consejo de Ministros así se determinaba. El último día de este año se realizaban los últimos trayectos entre Plasencia y Astorga. Tan solo cabía la posibilidad de que las comunidades autónomas estableciesen convenios con Renfe. Andalucía y Extremadura estuvieron dispuestos pero Castilla y León no. Tan solo permaneció abierta al servicio de mercancias durante 10 años más. 

Desde aquella fecha hemos visto desaparecer otros trenes emblemáticos como el “Sierra de Gredos” o el “Lusitania”, pero no se trata de caer en la melancolía recordando las consecuencias nefastas que ha tenido para Extremadura, sino de plantear palancas de un futuro sostenible. Una cicatriz abierta de 120 kilómetros, entre Plasencia y Salamanca, no puede ser un obstáculo insalvable para la reapertura del “Ruta de la Plata” y así poder contar con un corredor para el desarrollo de todo el Oeste peninsular al servicio de la descarbonización.

En los últimos años, fruto de la pandemia y la guerra de Ucrania, las condiciones geopolíticas, climáticas, económicas y de seguridad en Europa han cambiado ostensiblemente para una marcada apuesta por su reapertura. 

Se reclama todo un “Corredor del Oeste” que de respuestas tangibles en transporte de viajeros y mercancías al existente desequilibrio territorial entre el Mediterráneo y el Atlántico. Debe ser incuestionable que la franja interfronteriza de unos 800 kilómetros, entre Portugal y España, esté contemplada con sustantividad en el seno del Corredor Atlántico. Por otra parte, sería la clave para resolver una parte importante de la antigualla radial en la que Madrid termina siendo un colapso anunciado.

El estudio de viabilidad preceptivo del “Ruta de la Plata”, ofrecerá resultados en poco más de un año y no pueden ser sino favorable para su puesta en marcha. En los próximos meses la administración contará con un avance del mismo. Su aportación reticular a un diseño del ferrocarril radial, propio del XIX, sería incuestionable y un aporte esencial a la movilidad de toda su ciudadanía. Sobran razones ambientales, sociales y económicas para un eje Norte-Sur que facilitaría una autopista ferroviaria en la que desembocarían salidas naturales portuguesas como Faro-Huelva, Elvas-Mérida, Valencia de Alcantara-Cáceres, Vila Formosa-Salamanca.

Los proyectos de hidrogeno “Vía de la Plata” -Puertollano- Almendralejo-Gijón- serán sin duda un aliado en establecer sinergias de creación de empresas con el Corredor del Oeste en un territorio con superficie de sobra para su industrialización, agua suficiente y energía producida muy por encima de la que se utiliza en Extremadura. Esto es solo un apunte dirigido a la empresa Prointec, S.A.U., encargada de estudiar la viabilidad del corredor ferroviario Plasencia-León - “Ruta de la Plata”-.

¿Qué sentido tendría un informe positivo en 2026 y posponer su recuperación, en el mejor de los casos, para el 2050? A no ser que se parta de una premisa perversa en cuanto a su inviabilidad final. La ciudadanía del Oeste peninsular no puede esperar a la revisión de un reglamento de la Comisión Europea en el 2033 para su inclusión dentro de la Red Básica. ¿O nos está diciendo la clase política que no debemos volver a votar hasta esa fecha en función de su posicionamiento?

Las cinco comunidades autónomas que se beneficiarían del Corredor del Oeste “Ruta de la Plata” disponen de 14 eurodiputados, de distintas sensibilidades políticas que deben luchar conjuntamente en Bruselas por este objetivo. De igual forma que las Cámaras de Comercio están siendo proactivas en la demanda del Corredor del Oeste, las Diputaciones Provinciales, los Ayuntamientos y Agentes Sociales, junto a la ciudadanía, desde Sevilla a Gijón, debemos instar al Gobierno Central y a Bruselas para que el Corredor del Oeste sea una apuesta vital para reequilibrar territorial, social y económicamente nuestro país.

Recientemente, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible,Oscar Puente, ha calificado de “inaceptable” la postura del Gobierno francés de aplazar hasta 2042 la continuidad del Corredor delAtlántico hacia España. En análogo planteamiento, hay que trasladaral Sr. Ministro que el Corredor del Oeste no puede esperar a revisiones de reglamentos en el 2033 para que el Corredor del Oeste “Ruta de la Plata” sea una realidad antes de 2040, que asegure a Europa una comunicación de África, América y Europa por el Oeste,evitando el consabido colapso por Madrid. Seguro que el sentido común se acabará imponiendo en ambos casos.

Tras la convocatoria del pasado octubre en Plasencia, ya se está trabajando en nuevas convocatorias como Cádiz, Astorga y Pola de Lena, que sigan reclamando para el Corredor del Oeste “Ruta de la Plata” un espacio sustantivo en el futuro del Corredor del Atlántico.

La sostenibilidad, el futuro económico y la seguridad de Europa lo reclama.


Fdo:

Corredor del Oeste Ruta de la Plata : José María Alonso Rodríguez-

Manifiesto X Plasencia : Miguel Coque Durán 


Otros artículos relacionados con el tren "Ruta de la Plata": 

domingo, 8 de diciembre de 2024

Las luces de Plasencia no esconden sus sombras

 


La alcaldesa sangileña, Esther Sánchez, lamenta el anuncio de que la Unidad de Prevención de la Policía Nacional, tantas veces reclamada, se vaya a Cáceres, por “la indolencia del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Plasencia, que no ha movido un dedo para solicitarla”.

Al alcalde, Fernando Pizarro, el anuncio del Ministro de Interior le ha pillado de “voluntario” en la India, con lo cercano que cae Madrid para solicitar, exigir, instar, reclamar y transformar lo próximo. 

Cuando son los movimientos ciudadanos los que tienen que poner el dardo en la diana de demandas históricas para la sociedad es que parte de la clase política no atina con las pulsiones sociales que se manifiestan cada vez más evidentes. Y es que las efímeras luces de navidad no pueden esconder las múltiples sombras de las ausencias sostenidas de nuestros próceres. Con lo aledaño que queda Moraleja o Castelo Branco para reclamar la finalización de la Autovía Moraleja-Monfortinho, no siendo de su consideración hacer acto de presencia en ninguno de los eventos organizados por la sociedad civil del norte extremeño.

En los últimos meses se viene reclamando por entidades y organizaciones de Plasencia y el Norte de Extremadura, actuaciones sustantivas para su desarrollo. Cada vez es más acuciante resolver las demandas por las que venimos apostando, mientras los resultados de la gestión municipal del Sr. Alcalde es la incomparecencia.

El diálogo con la Diputación de Cáceres está bajo mínimos, con el gobierno central, inexistente, y con la Junta de Extremadura es de prudencia extrema porque no vaya a ser que le condenen, cuatro años más, a optar a otra mayoría en Plasencia.

Tras el inicio del gobierno de la Sra. Guardiola, el consejero de economía de la Junta de Extremadura, Guillermo Santa María, se comprometió en Plasencia a desarrollar el suelo industrial de la ciudad, a la vez que el alcalde anunciaba que dispondríamos de 20 hectáreas en el 2024. Al cierre de este artículo, un servidor se dispone a ver la película: “El Hombre que nunca estuvo allí”. ¿Alguna gestión realizada con Avante para posibilitar el espacio que debe ser una plataforma logística intermodal, en un futuro? Algo parecido al espacio del que disponen Badajoz, Mérida, Navalmoral o Cáceres.

Se desestima por el Ministerio de Turismo la subvención para la restauración de paños de la muralla; devolución de subvenciones en infraestructuras como la residencia de mayores; parques infantiles para el derribo; las escaleras mecánicas en su laberinto; conflicto vecinal de San Miguel sin resolver; una mano de pintura en los aparcamientos rotatorios; el robo de la corona de la catedral del que nunca se supo; el Alvia que no entra en Plasencia o los viajeros sin billetes; la estación de autobuses sin reformas; pintores de la tierra sin museo, consorcios culturales o turístico sin futuro...

Las “luces” de los 43000 habitantes empadronados, según Fernando Pizarro, son esas ilusiones piadosas a la búsqueda de una justificación ante la galería que puede insuflar la idea de recuperación de la ciudad, si no fuese porque el Instituto Nacional de Estadística le devolverá a la realidad el uno de enero del próximo año. La bajada del paro a dígitos previos a la crisis sería una buena noticia si no fuese porque en Plasencia desde 2011 al 2024 ha desaparecido una población activa en la ciudad, de dos mil trabajadores-as.

Cuantas más luces alumbran la plaza de Plasencia, más son las sombras que se multiplican por la ciudad.  

     

jueves, 28 de noviembre de 2024

Plasencia en tierra quemada



El movimiento ciudadano de Plasencia y el Norte de Extremadura sigue en su proceso de acumulación de fuerzas ante la atonía política reinante en una ciudad que es denominada por investigadores de la Universidad de Extremadura como una "anomalía" dentro de Extremadura, debido al fondo de saco en que hemos terminado, con su correspondientes consecuencias en materia de conectividad y empleo.  

Las previsiones del Ministerio de Transporte y Adif es que la línea de alta velocidad Plasencia-Talayuela, que ya lleva un setenta por ciento de ejecución, esté finalizada su electrificación en 2027. Este dato determina, si nadie lo remedia, que Plasencia y con ella más de 200.000 habitantes del Norte de Extremadura se quedan sin el "apeadero" de Monfragüe, por cierre obligado, quedando como tierra quemada. La capacidad de anticipación política queda en entredicho.

En paralelo, el pasado 25 de noviembre se aprueba la tercera licitación de un estudio informativo para la ubicación de la estación que concluirá a principios de 2027; que  tendrá su periodo de alegaciones, deberá ser evaluado desde el punto de vista de impacto ambiental, con posterior adjudicación técnica para sus obras y la correspondiente expropiación de terrenos si así fuera necesario. En definitiva, todo apunta a que la Estación de Plasencia-Norte de Extremadura no estaría operativa hasta finales de esta década. 

Y mientras tanto, ¿qué?. ¿Dónde podremos optar a nuestro derecho social de movilidad a través del tren? Para ello, la lógica apunta a que tendríamos que trasladarnos a la estación de Navalmoral o Cáceres para poder optar a la utilización de este servicio ferroviario. A no ser que aseguren la entrada de los trenes en Plasencia con la correspondiente "pérdida de tiempo" y que hasta ahora ha determinado que los Alvia no entren en Plasencia por este motivo. Seguro que la situación que se avecina tendrá consecuencias para un veinticinco por ciento del territorio extremeño y sus ciudadanos en un derecho básico como es la movilidad, donde no puede haber discriminación alguna.

La ciudadanía acaba de interpelar, nuevamente, a todos los responsables políticos; destacando al Delegado de Gobierno, Sr. Quintana, al portavoz socialista Cesar Ramos por la provincia de Cáceres, al Sr. Alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro y a la silenciosa Junta de Extremadura con respecto lo que debe ser su obligación: anticipar este vacío que como punta de un iceberg anuncia un conflicto al que deben dar solución si no quieren provocar movilizaciones ciudadanas a lo largo de 2025. 

La petición ciudadana ha quedado fijada como Estación con carácter intermodal, de viajeros y mercancias que requieren de una Plataforma logística con suelo industrial que abra las posibilidades de desarrollo de todo el norte extremeño. Es fácil y debe avanzarse en la concertación de los distintos gobiernos con la Sociedad Estatal de Promoción y Equipamiento de Suelo - SEPE- y AVANTE.

Este territorio nuestro presenta los niveles de empleabilidad más bajos de Extremadura; situando al ámbito geográfico por debajo del Tajo como el espacio más propicio al empleo porque está ligado a la confluencia de Autovías A-5 y A-66 y a otras opciones de comunicación. Por eso, no es casual que haya una demanda social por la terminación de la Autovía Moraleja-Monfortinho o el reclamado Corredor "Ruta de la Plata" que debe avanzar con la construcción de la línea Plasencia-Salamanca. 

En Plasencia, empresarios, sindicatos, vecinos y movimientos sociales quieren respuestas y calendarios en relación a su estación de alta velocidad y desarrollo de suelo industrial. ¡Somos todos responsables!